Originaria de los Himalayas, la Ashwagandha (Withania Somnifera) se utiliza desde hace miles de años en la medicina ayurvédica gracias a sus innumerables beneficios para la salud. Su característica más destacable es que aumenta nuestro nivel de energía y al mismo tiempo ayuda a conciliar el sueño, disminuyendo el exceso de cortisol causante del insomnio asociado al estrés.
También mejora el funcionamiento de las glándulas suprarrenales haciendo que el organismo responda mejor ante el estrés, y estimula el sistema inmunológico previniendo resfriados e infecciones. Aumenta la capacidad sexual y la fertilidad,regula el azúcar en la sangre y ayuda a suprimir la necesidad de consumir azúcar.
Tiene efectos positivos sobre el sistema endocrino, cardiovascular y el sistema nervioso central, y ayuda al organismo a producir sus propias hormonas tiroideas. Incluso posee efectos ansiolíticos semejantes al Lorazepam, actuando como un anti-depresivo sin los efectos secundarios de este tipo de medicamento químico.
Aumenta además la capacidad cognitiva y la memoria; es antioxidante, y previene el Alzheimer y la senilidad.
Idealmente, se toman dos cápsulas por la mañana para empezar el día con más energía, y dos en la noche para dormir mejor.
No se debe consumir junto con barbitúricos ni con medicamentos inmuno-supresores, y tampoco durante el embarazo.